Hoy voy a reseñar un DLC llamado Kingmaker para el F2P War of the Roses, y en general el propio juego en sí, editado por Paradox Interactive del desarrollador Fatshark lanzado en febrero de 2013. Un videojuego multiplayer ambientado en la lucha PvP, dos bandos de jugadores, enfrentados el uno contra el otro con arsenal militar de época medieval, concretamente de la Baja Edad Media. De entrada ya era poco halagüeño que fuera un multiplayer F2P de tipo PvP, pero creyendo que el DLC Kingmaker podría dejar las cosas algo más arregladas, fue un error.
War of the Roses es un juego de acción en tercera persona basado en equipos y ambientado en la Inglaterra del siglo XV. Dos ramas rivales de la Casa Real de Plantagenet –la casa de Lancaster (los rojos) y la casa de York (los blancos)– luchan por el trono, y el jugador es arrojado en medio de la refriega.
Los años de 1455 a 1485 en Inglaterra son un extraordinario escenario repleto de conflicto, traición y masacres. En el despertar de la «muerte de la caballería» en Agincourt en 1415 y la introducción de la pólvora, la guerra cambió; se arrojaron los guantes, por así decirlo. Lo viejo y lo nuevo chocaron en el campo de batalla mientras vendettas personales motivaban el ansia de guerra.
War of The Roses pone a los jugadores mano a mano con sus oponentes usando auténticas y viscerales armas del periodo, incluyendo espadas anchas, arcos largos y hachas de batalla.
Opinión personal
- Bueno, seamos directos. No existe historia en dicho juego a parte de lo mencionado en la sinopsis como orientación de a dónde se nos deja a combatir. Se trata de un multiplayer y cuando, a pesar de los múltiples servers que se pueden hallar a día de hoy, llegará un momento que el juego acabará muerto. De hecho de los más de 6000 usuarios que solía tener online a la vez ahora mismo se ha reducido a un puñado de cientos de nada. Y los que suelen quedar como es costumbre en los multiplayer F2P acaban por ser los que realmente saben, y bastante. Esto conllevará una curva de dificultad extra.
- Sin embargo el peor palo se lo lleva que aunque Kingmaker nos permite crear y modificar a nuestro antojo los personajes, el sistema PvP es libre y no tiene corrección o balanceo de habilidad entre los usuarios, unido a un sistema que aunque tengamos Kingmaker vamos a tener que farmear experiencia y oro matando e hiriendo a otros usuarios muchas, muchísimas horas, añadiendo el factor de luchar contra gente con equipos infladísimos.
- Esos handicaps bastante graves, a los que se suma el casi práctico abandono de los desarrolladores, se le une que el sistema de combate es bastante difícil de controlar, sobretodo para los guerreros pesados que empleen el propio arma como medio de defensa. Se le suma un desequilibrio de equipos ridículo, y es que un personaje con ballesta y en buen lugar apostado puede jugar al tiro al pato fácilmente.
- A pesar de haber dos equipos enfrentados en combate, lamentablement el fuego amigo está activado. Y existe un buen número de jugadores que acaban entrando en nuestro propio equipo sólo para atacar a los de su propio bando llegando a situaciones esperpénticas de luchar contra un guerrero enemigo, mientras nos caen flechas enemigas y uno de nuestros aliados nos rodea junto con el guerrero enemigo poniéndose de acuerdo ambos para pegarnos una paliza en un 2v1 sin sentido.
- Gráficamente demanda bastante por poca optimización, pero tiene buen apartado visual. Lamentablemente bastante desaprovechado por la escasa jugabilidad que da de sí este War of the Roses.
- Al parecer inicialmente cuando no era F2P el juego aun se podía mantener un cierto equilibrio de combate, sin embargo tras volverse F2P uno suelta el P2W consigue el equipo cheto y revienta vilmente a los novatos aunque sea literalmente un manco jugando a estos juegos. Lo que conllevará bastante frustración si no queremos vernos involucrados en decenas y decenas de horas de farmeo para desbloquear una buena configuración.
Conclusión
Comenzó bien, pero entre el F2P, los posteriores cambios, la caídas de jugadores y el abandono del soporte ha provocado que una buena idea se convierta en otro P2W más del montón sin sentido. No lo recomiendo para nada.