Aun a pesar de no terminarme de ver Noir, aun prosigo intercalando otros anime del género ecchi para amenizarla. Hoy le toca a Hentai Ouji to Warawanai Neko que vendría a traducirse como El príncipe pervertido y el gato que no sonrie, también conocido como HenNeko o Towanai que originalmente son unas novelas ligeras escritas por Sou Sagara e ilustrada por Kantoku. A su vez también se adapta en manga por parte del mismo escritor y bajo el arte de Okomeken. El anime por su parte es una adaptación de 12 episodios a cargo del director Youhei Suzuki y del estudio J.C.Staff emitido por primera vez en abril de 2013. Como buen anime ecchi no faltarán las escenas de habituales con una comedia explosiva que desde el primer episodio sabe hacer reír. Pero la gran cualidad de este anime no es su apartado de comedia, no innova en un fetiche o personaje como en otros sino que apuesta por una trama fuerte y seria junto a personajes que resultan carismáticos. Veamos por qué.
Sinopsis
La historia se centra en un muchacho de secundaria llamado Yôto Yokodera que se pasa la vida pensando en sus “deseos carnales”, pero nadie piensa que sea un pervertido porque sus intenciones son mal entendidas y tiene un gran habilidad para relacionarse en público, mateniendo así la fachada. Un día hablando con su amigo éste le cuenta acerca de una estatua de un gato que concede cualquier deseo, así que decide ir a pedirle que le permita ser un poco mas sincero cómo y dónde quiera sin tener que preocuparse. En el lugar de la estatua se encuentra con Tsukiko Tsutsukakushi, una chica de su mismo instituto que también tiene su propio deseo: no mostrar sus emociones faciales tan fácilmente.
A partir de aquí, la mágica estátua del gato que no sonríe empezará a obrar su magia para bien… o para mal. La vida de ambos ya no será la misma cuando bajen de la colina y un fuerte y poderoso destino sobre los recuerdos van a cambiar la vida de Yokodera y de Tsukiko.
Opinión personal
- El título ya es un despropósito, que un protagonista se llame «Príncipe pervertido» (Hentai Ouji) ya claramente nos deja entrever que estamos ante un anime ecchi, así que preparáos para una buena ración de escenitas de contenido picante… medio en broma, medio inocentes eso sí… pero estan ahí. Ahora bien, aquí estamos ante un anime con una historia con un elemento mágico de fondo, no son las situaciones simplemente «comunes» (Love Hina) o las situaciones llevadas por extremos absurdos y fantásticos (MM!), aquí todo luce con realidad, motivo por el cual nuestro protagonista inicial, Yokodera, debe ocultar sus verdaderos pensamientos calenturientos. Pero ¡ah!, eso se termina con su deseo al dios gato, y empiezan las situaciones de comedia y a subir el nivel ecchi. Desde el primer episodio con el cruce con Azuki Azusa denigrándola será un buen ejemplo.
- ¿No dijiste que tiene un elemento mágico? Sí, así es. No solamente se cumplirá el deseo de Yokodera (no tener tanta habilidad para ocultar sus sentimientos) sino también los de Tsutsukakushi que quiere ocultar sus emociones y el dios gato así lo hará hasta el punto de arrepentirse y volverla una muchacha inexpresiva. Ante un Yokodera que puede decir de todo y no tiene pelos en la lengua, y una compañera como Tuskiko que oculta sus expresiones, tendremos un duo potencial para las situaciones cómicas. La presencia del dios gato y su magia solo serán dos deseos inicialmente, si descartamos el del amigo de Yôta, Ponta, se incrementará episodio tras episodio descubriéndose que hace algo más que conceder un deseo, que exige algo más y que detrás de esto se encuentra una trama algo más enrevesada con viajes en el tiempo incluídos.
- No existe un reparto de personajes secundarios realmente fuertes, más bien todo orbita junto al duo de personajes mencionados y Azuki Azusa (un extraño triángulo amoroso imperfecto… ya vereis por qué), junto a otros que inicialmente son secundarios sin importancia que a lo largo de la trama evolucionarán y tendrán su peso como Tsukushi Tsutsukakushi, la hermana de Tsukiko, llamada la Reina de Acero por Yokodera debido a ser la capitana del club de atletismo (al cual pertenece Yôta). Los personajes más relevantes guardan una relación bastante familiar y todo parte de… bueno mejor os evito el spoiler. Su argumento gana fuerza por un buen guión que, al margen de que sea ecchi, tendremos una historia de principio a fin con sentido donde se resolverán no solo los problemas de Yôta y de Tsukiko, sino que se abrazará una fuerza y un estilo en personajes que tienen personalidad: incluso sin reir o poner cara de odio, Tsukiko es super expresiva por las situaciones de respuesta que nos da el propio Yôta, y eso es decir mucho teniendo en cuenta que la pobre seyiu que la interpreta tampoco puede hacer cambios de tono de voz dado al guión xD
- Por tanto su apartado en guión y personajes brilla mucho, se echa en falta que hubieran más con la fuerza que tiene los principales, pero está claro que en 12 episodios y teniendo en cuenta la importancia de la trama que tiene per se, quizás habrían estropeado el balance. Lo único que no me acabó de gustar son sus últimas escenas en el último episodio, creo que no acaban de cuajar mucho. Y lo digo porque en este anime pareciera que partimos de unos primero episodios donde la comedia, el juego y la diversión con su punto ecchi está cuasi explosiva, y avanza hacia una historia más adulta por los propios problemas personales de los personajes y los recuerdos… los recuerdos olvidados. Los últimos episodios pareciera que escape del género del ecchi para entrar más en un drama… y quizás las últimas escenas sean para recordarnos que estamos ante un anime ecchi de comedia.
- Su apartado visual está a la altura de este género y tiene el sello de calidad de un estudio como J.C.Staff de forma que su animación no solo es muy notable ya que también tiene un estilo muy preciosista y el aporte mágico que tendrá en ocasiones está muy bien elaborado. No veremos grandes panoramas puesto que buena parte de la historia transcurre en interiores y exteriores urbanos. Pero algunos lugares como la casa tradicional de las hermanas Tsutsukakushi, la colina del dios gato o la cantidad de detalles del escenario, dejan un cuidado apartado en sus escasos 12 episodios. Lo único que no me agrada es ese estilo tan excesivamente moe que tiene y que ya es la tónica general, a su vez por dar esa apariencia de bishôjo y bishônen que a veces se hace… pero bueno el resto lo compensa.
- Sus openings y endings son extremadamente pegadizos. Como he dicho, en cuestión de animación la experiencia de J.C.Staff sabe como hacer movimientos y coreografías que enganchan y la música no se queda atrás.
Ending del anime sin créditos y con superposición en fondo, como se puede escuchar es muy pegadiza. No os dejéis llevar por las apariencias de Tsukiko porque no es adorable precisamente XD.
Conclusión
Si te gusta el género, tienes que verlo. Si eres de los que prefiere algo que no tenga tanto de eso, pero le gustan las comedias o quiere ver una historia distinta que parece que no será original… pero que guarda un pequeño drama en el fondo de la historia, si les una oportunidad, verás como no te decepciona y a que se deja ver fácilmente. Recomendado.